“Desconocer la palabra, es desconocer a Cristo…”
Por:
Roberto López Medina
Tercero de Teología.
Para continuar con
nuestra reflexión sobre la Lectio divina,
esta columna la dedicaremos al primer paso: Lectio.
El primer peldaño es
la lectura. Se trata de leer el texto bíblico de forma pausada, atenta y repetida,
y de comprenderlo en su sentido literal e histórico.
Esto consiste en
descubrir… ¿qué dice el texto? Se recomienda leerlo una vez. Al nivel más
básico, uno se pregunta: ¿qué sucede en este pasaje del Evangelio?
A veces conviene
usar un comentario bíblico o leer la explicación de la propia Biblia para
entender mejor el contexto. Es el nivel más superficial y exterior, pero
indispensable para pasar a los siguentes.
El tiempo estimado
para este primer paso podría ser de 15 minutos, cuidando de no adelantarse a
primeras interpretaciones, incluso un tanto subjetivas del texto. No olvidemos
que el guía de nuestra Lectio divina
es el Espíritu Santo, a Él confiemos nuestra lectura orante.
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